Saludos:
Después de conocer el fallecimiento de ÍÑIGO CABACAS, también nosotros queremos unirnos al dolor de sus amigos y familiares y hacer patente el nuestro propio por su desaparición. Hablar de desaparición aunque siempre triste sería del todo natural de no ser porque en este caso ésta es el resultado de un asesinato cobarde e injusticable como todos los que comete la policía, sea la que sea, sea de donde sea y se llame como se llame. Por eso este pesar está cargado de rabia, de asco, de indignación y de odio hacia quienes han cometido semejante vileza, sólo una más entre tantas.
Antes, ahora y siempre, odio eterno a todas las policías del mundo.
Que la tierra te sea leve y tu muerte no quede impune, Íñigo.
Siempre actuan como salvajes, a pelotazo limpio. Recuerdo unas fiestas de Bilbao que nos sacaron de todos los bares de Bilbao La Vieja a chuchazos y bolazos, lamentablemente cuando tu forma de cumplir la ley es esta, mas tarde que temprano alguien paga ese abuso de poder. Los medios al dia siguiente hablaron de 6 ertzainas heridos cuando fuimos golpeados cientos. La version policial siempre la misma, que fueron recibidos a pedradas cuando intentaban hacer llegar una ambulancia. SIEMPRE LAS MISMAS MENTIRAS, EL MISMO DISCURSO.
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